Conocida
por su acrónimo XBRL
(extensible Business Reporting Language),
esta norma nace de la propuesta lanzada
en 1998 por Charles Hoffman, un experto
contable y auditor, para simplificar
la automatización del intercambio
de información financiera mediante
el uso del lenguaje XML -entonces emergente
y hoy casi ubicuo en todo lo relacionado
con Internet-.
XBRL in Plain English (con subtítulos en inglés y castellano)
Hoffman era
muy consciente de la necesidad de
sistematizar este intercambio, a consecuencia
de sus muchos años de experiencia
con sistemas contables automatizados.
En poco más de seis años, esta sencilla
idea ha conseguido atraer el interés,
primero, y el respaldo, posteriormente,
de toda una comunidad de individuos
y organizaciones, públicas y privadas,
representando un gran número de países
y coordinados en XBRL Internacional,
de la que nuestra Asociación es interlocutor
en España.
Bety la contadora y el XBRL (video educativo realizado por la Universidad de Bucaramanga)
Cabe destacar
que algunos miembros de XBRL España
han participado de forma relevante
en la promoción y puesta en práctica
del estándar XBRL. Lo que aporta XBRL
como novedoso es su característica
de ser XML. El XML es el lenguaje
utilizado en Internet para el intercambio
de información. Multitud de herramientas,
de facilidades, de tecnología está
ahí, dispuesta a ser utilizada si
los datos vienen en formato XML. Un
informe de una empresa expresado en
XBRL, podrá ser visualizado en un
navegador de Internet, o capturado
en una hoja Excel, o incorporado a
una base de datos sencilla. El mismo
informe tratado por tres programas
distintos. Programas de uso diario,
de los que todo el mundo tiene en
su PC y sin tener que hacer costosas
adaptaciones en esos programas.
Otro aspecto
novedoso en XBRL es la estandarización.
El concepto de taxonomía
como indicador de las líneas maestras
sobre las que se tiene que fundamentar
el intercambio de información, hace
que el tratamiento de los datos se
simplifique enormemente. Un analista
financiero, teniendo que tomar cuentas
de 15 empresas distintas, cada una
de ellas expresadas en un lenguaje
y en un formato distinto. O un controller
de una empresa con 12 filiales, que
tiene que realizar hoy en día un trabajo
ímprobo para consolidar sus cuentas,
cada una de ellas expresadas en su
propio lenguaje. En ambos casos, la
adopción de XBRL hará que estos trabajos
de consolidación o de análisis estén
a una distancia tan sólo de un clic,
dado que el lenguaje utilizado para
la preparación de los datos será el
mismo. Y además será un buen lenguaje,
en el sentido de que no existirán
ni ambigüedades ni dudas sobre los
conceptos expresados.